Aplicaciones
Este ingrediente es ampliamente utilizado para prevenir la oxidación, inhibir el crecimiento microbiano y prolongar la vida útil de los alimentos y bebidas.
Usos más comunes:
- Elaboración de vinos y sidras (control de oxidación y fermentación)
- Conservas vegetales y frutas deshidratadas
- Zumos y bebidas refrescantes
- Productos de confitería
- Esferificaciones (para estabilizar soluciones y evitar oxidación en técnicas de gastronomía molecular)
Propiedades destacadas
- Potente acción antioxidante
- Efecto antimicrobiano
- Compatible con procesos de pasteurización y almacenamiento prolongado
Condiciones de uso sugeridas
Dosificación: según normativa y formulación específica, habitualmente entre 50 y 200 mg/kg, dependiendo del producto final y la función deseada.